![]() | SuperconectadosLa Nación Nora Bär 12.03.2008 Una conexión hogareña a Internet funciona más o menos a 512 kilobytes por segundo. Incluso a veinte veces esa velocidad, hay momentos en que el exceso de tráfico electrónico -justo cuando el tiempo corre- puede hacer que el sistema en el que estoy escribiendo este texto lo saque a uno de quicio, igual que las avenidas de Buenos Aires. Pero pronto, si el proyecto acordado hace un par de días en Río de Janeiro prospera, los sistemas científicos de Brasil y la Argentina podrán obviar este tipo de dificultades que entorpecen o directamente hacen imposible el trabajo conjunto entre equipos de ambos países. Se integrarán a través de una conexión electrónica que funcionará a una velocidad de nada menos que un Giga por segundo. Suficiente como para "bajar" de Internet una película de dos horas en medio minuto... Esta "superautopista" de la información, que inicialmente vinculará Porto Alegre y Buenos Aires, tendrá aplicaciones estratégicas vitales para el sistema científico: desde operar equipos a miles de kilómetros hasta trabajar en conjunto mediante videoconferencias o hacer evaluaciones y capacitación a distancia. "Se aplicará en educación, investigación, cultura y salud -dice José Monserrat Filho, jefe de la Asesoría de Asuntos Internacionales del Ministerio de Ciencia y Tecnología de Brasil-. Al mismo tiempo, permitirá expandir las redes nacionales de investigación e iniciar la misma integración con Uruguay, Chile y Paraguay." Según cuenta Filho, la quinta reunión del Comité de Gestión de Alto Nivel Brasil-Argentina de Cooperación en Ciencia y Tecnología aprobó con entusiasmo la propuesta de articular la creación de esta nueva y poderosa infraestructura de comunicación entre ambos países y le asignó tal importancia que resolvió proponer su incorporación en la agenda de prioridades establecida por los presidentes de ambos países el último 22 de febrero. La lista también incluye proyectos nucleares, espaciales, de nanociencia y nanotecnología, y de energías renovables. La iniciativa permitirá continuar y superar la Cooperación Latinoamericana de Redes Avanzadas (Clara), creada en 2004, y que hoy entrelaza 12 países y cerca de 600 instituciones de educación e investigación de la región. Durante estos años, las utilidades que brindó esta vía de circulación de datos a gran velocidad fueron innumerables. Entre sus usuarios figuran el Servicio Meteorológico Nacional, la Comisión Nacional de Actividades Espaciales y el Observatorio Pierre Auger, el mayor proyecto astrofísico internacional, cuya sede se encuentra en Malargüe, Mendoza. Los científicos argentinos accedían a ella a través de la Red Teleinformática Académica (Retina), con oficinas en Esmeralda al 300, que el año último dio paso a InnovaRed, dependiente del Conicet. Ahora, la Rede Nacional de Pesquisa (RNP) brasileña y su contraparte local, la citada InnovaRed, deberán acordar un plan de trabajo conjunto que haga posible llevar a buen puerto este ambicioso proyecto. Un verdadero salto evolutivo en materia de comunicación a alta velocidad. fonte: http://www.lanacion.com.ar/edicionimpresa/cienciasalud/nota.asp?nota_id=994887 |